sábado, agosto 09, 2008

¿ES COMPRENSIBLE EL UNIVERSO?

Según Victor J. Stenger profesor emérito de física y astronomía de la Universidad de Hawaii, las respuesta es si. De hecho, ese el titulo que lleva una de sus obras “The Comprehensible Cosmos”. Obra interesante pero no apta para todos los públicos. El libro está dividido en dos partes. En la primera de ellas trata de hace ver porque el universo es comprensible y además da una interesante respuesta a la pregunta ¿de donde vienen las leyes de la física? La segunda parte es un resumen de las matemáticas que se necesitan para abordar todo lo dicho en la primera parte del libro de forma cuantitativa. Esa segunda parte no requiere ser leída para entender el resto del libro, no obstante el nivel de las matemáticas expuestas es de universitario para arriba.

En la primera parte del libro, la más divulgativa. A pesar de estar bien escrita y explicada con claridad la obra no es apta par alguien que se acerque al mundo de la física y la cosmología por primera vez. Si ya se han leído otros textos de física y cosmología entonces se le puede sacar mucho más provecho al libro ya que expone un punto de vista que no suele abundar, lo que hace que el lector tenga que reflexionar bastante.

Otra pregunta que se plantea en el libro es ¿existe una realidad objetiva sea esta la que sea? La respuesta dada por Stenger es afirmativa. El autor defiende esta postura magistralmente, y se basa en la demostración que hizo Emmy Noether hace un siglo. Dicha demostración consiste en que las grandes leyes de conservación de la energía, del momento lineal, del momento angular están íntimamente conectadas con las simetrías del espacio-tiempo. Esto así dicho no parece muy impactante pero a lo largo del libro se ve las implicaciones que esto puede llegar a tener.

En resumen, aunque queda mucho por saber de como es el universo algo que el propio autor reconoce en el libro, al menos sabemos que existe una realidad objetiva sea esta la que sea. Parece que estamos empezando a estar en condiciones de dar respuestas a grandes preguntas del tipo ¿de donde vienen las leyes de la física? O ¿de donde y como surgió el Universo? Sin necesidad de recurrir a entes divinos o sobrenaturales, lo cual ha sido la norma hasta el momento. Probablemente dentro del libro no está la ultima palabra ni las respuestas definitivas a esas preguntas, pero es interesante ver como la ciencia las está empezando a afrontar de forma seria y concienzuda.

Ismael Pérez Fernández